En días recientes, Ubisoft informó que, como producto del pobre desempeño comercial de juegos como Mario + Rabbids: Sparks of Hope o Just Dance 2023, la compañía enfrenta una crisis financiera que requerirá recorte de gastos y otras medidas para poder sortearse. Como parte del mensaje, Yves Guillemot dijo que "la pelota está de su lado de la cancha", refiriéndose a los empleados, lo cual fue interpretado como un señalamiento de responsabilidad.
Así las cosas, ayer hubo una reunión virtual entre empleados y ejecutivos del atormentado publisher, misma que de acuerdo con Kotaku, empezó con Guillemot disculpándose por haberse expresado de un modo que fue malinterpretado.
"Escuché su retroalimentación y lamento que se viera de esa manera. Cuando dije que la 'pelota está de su lado de la cancha' para entregar nuestra alineación [de juegos] a tiempo y en el nivel de calidad esperado, quería evocar la idea de que hoy más que nunca necesito de su talento y energía para hacerlo posible. Este es un trayecto conjunto que empieza, por supuesto, conmigo y el equipo de directivos para crear condiciones que permitan que todos tengamos éxito".
Dicho lo anterior, la amenaza de paro se cierne sobre Ubisoft París y, a juzgar por los reportes de Kotaku, algunas de las exigencias del sindicato, como semana laboral de 4 días y aumento salarial para compensar por la inflación fueron descartadas, sin mencionar explícitamente el tema de la posible huelga.
"La directora de personal Anika Grant rechazó una propuesta reciente de semana laboral de 4 días y dijo que los aumentos salariales solicitados para mantenerse a la par con la inflación estaban fuera de discusión en medio de los problemas financieros".
Guillemot también trató de tranquilizar a la fuerza laboral al decir que hacer más con menos, no necesariamente significa despidos, sino reorganización, pero de acuerdo con las fuentes de Kotaku, el personal no tomó el mensaje con optimismo y cuestionó el enfoque de la compañía de tratar de adaptarse al mercado, en vez de intentar imponer nuevas tendencias. Un buen ejemplo de ello es el reporte de ayer, en el que se habla de que Ubisoft tuvo, en algún punto, 12 juegos battle-royale en desarrollo, varios de los cuales seguramente fueron cancelados.
Skull and Bones, retrasos y cancelaciones
El mensaje de hace algunos días incluyó, entre otras varias cosas, el enésimo retraso de Skull and Bones, el juego de piratas multiplayers que fue anunciado hace años, y el cual sigue atorado, junto con otros proyectos, tales como Beyond Good and Evil 2, XDefiant y el Remake de Prince of Persia: The Sands of Time.
Pero, en paralelo, también hubo 3 cancelaciones de títulos desconocidos, que se suman a otras anunciadas el año pasado, y entre las cuales había hasta juegos de realidad virtual.
Assassin’s Creed, la última salvación
En este escenario, parece que el único juego a salvo, prometedor y rentable es Assassin’s Creed, de cuya marca se desprenderán varias entregas futuras, incluyendo una especie de hub para la franquicia, bautizado Assassin’s Creed Infinite, pero también un juego móvil, uno souls-like, bautizado Hexe y otro tradicional, Assassin’s Creed Mirage.
Cualquiera que sea el caso, la amenaza de huelga y los rumores de fusión siguen muy presentes y estas noticias no harán más que agravar la situación bursátil de Ubisoft, compañía que ha perdido 70% de su valor en los últimos tiempos.