La Edad Media, el Viejo Oeste, la Europa de la Segunda Guerra Mundial, la China feudal, estas son algunas de las ambientaciones más socorridas por los desarrolladores de videojuegos, a lo largo de la historia de esta forma de entretenimiento. Juegos de piratas, vaqueros y soldados, los hay por montones, pero qué hay del Renacimiento en Bavaria durante el siglo XVI. ¡Ah, verdad! Eso no lo esperabas. Pues bueno, ese es precisamente el punto donde se ubica uno de los juegos más singulares y sobresalientes para Xbox Game Pass de este año. Pentiment.
Pentiment es una aventura gráfica, point-n-click, desarrollada por un pequeño grupo de diseñadores de Obsidian Entertainment, que cautivó a propios y extraños durante la pasada conferencia veraniega de Xbox. Y capturó la atención de muchos debido a una apariencia realmente muy singular que lo hacía parecer una xilografía, en otras palabras, un libro de la Edad Media.
Partiendo de ahí podemos garantizarte que Pentiment es algo especial. Nosotros ya lo jugamos y, pese a sus matices, no podemos negar que se ubica en una categoría propia, en términos de dirección de arte, pero también de historia, pues es un proyecto que no tiene miedo de salirse del molde.
Adoptas el rol de Andreas Maler, un artista de la antigüedad, quien está por terminar su obra maestra en un pequeño pueblo de Alemania, pero ese pequeño pueblo yace en una coyuntura histórica importante, que enfrentará a los campesinos con la jerarquía católica. Si suena como cátedra de universidad es porque lo es. Pentiment no solamente se ve como una clase de historia, sino que imparte una, mediante su presentación, sí, pero también mediante los diálogos, las situaciones y los detalles que incorpora.
Si eres amante de la historia, este juego es para ti
Los personajes, por ejemplo, hablan a través de cajas de texto, pero no todos escriben con el mismo tipo de letra -incluso hay quienes usan imprenta- y ese estilo distintivo te dice algo sobre cómo son estos protagonistas. La hora de la comida es una instancia más donde el juego desarrolla su argumento, pero también expone los usos y costumbres de otra época y, como esos, hay cuantiosos detalles que convierten a Pentiment en todo un viaje al pasado.
Dicho eso, como quizás ya has concluido, Pentiment no es un juego para todos, como no es para todos pasar la tarde en un museo o leer un libro sin ilustraciones. Este es un juego interesantísimo, pero también denso y de mucha lectura, donde la interacción rara vez va más allá de decisiones de diálogo. La buena noticia es que llegó a Game Pass hace 3 días y si eres suscriptor, puedes darle una probada para descubrir si es para ti o echártelo completo en unas 3 o 4 sesiones de 5 horas, que es lo que el juego dura, aproximadamente.
Pentiment debutó con muy buenas calificaciones en Metacritic el pasado 15 de noviembre y, fiel a todo aquello que es producto de Xbox, salió directamente a Game Pass donde puedes disfrutarlo hoy mismo.