Considerado como el héroe más bondadoso y humanitario de toda la historia, Superman ha pasado a la historia como el arquetipo por excelencia de los superhombres con capa. Sin embargo, lo que muy pocos saben es que, en sus inicios, el personaje erigía una serie de valores muy diferentes. Tan es así que Superman mató en su primera aparición en los cómics: este es el origen incómodo del mayor superhéroe de todos.
El incómodo origen de Superman en los cómics
Cuando uno piensa en Superman, lo primero que viene a la mente es una figura de esperanza, justicia y compasión: un personaje que no representa solo a un alienígena con fuerza sobrehumana, sino a un ideal: alguien que jamás mataría, que siempre encontraría una salida pacífica, incluso ante el caos. Esa imagen se ha reforzado por décadas de cómics, películas, series animadas y discursos heroicos. Pero en sus inicios, el personaje era todo lo contrario a ese símbolo de bondad casi divina.
En el cómic de 1939, Superman #1, el Hombre de Acero todavía era un justiciero callejero con métodos extremos. Aunque nunca mostró una ejecución directa (a diferencia de Batman), hay una escena clave que ha generado debate durante años: Superman carga contra un abusador doméstico, lanzándolo contra una pared con fuerza brutal y lo deja atrapado entre los escombros sin hacer el menor intento por ayudarlo.
El mensaje es claro: si muere, es su problema, y aunque no se nos muestra en el cómic, lo más probable es que acá el hombre murió. No hay dilemas morales, no hay culpas ni redención. En otra historia de ese mismo número, también destruye propiedades privadas, amenaza a políticos corruptos y juega con el miedo como herramienta de justicia. En sus inicios, el Hombre de Acero no era el defensor de la verdad y la esperanza que conocemos hoy, sino un símbolo de justicia implacable en tiempos de crisis.
¿Cuándo se estrena la película de Superman?
Comparar a ese Superman con el que todos conocemos hoy es como ver dos personajes distintos. Uno operaba en las sombras, como un ángel de la venganza; el otro inspira a millones con discursos sobre esperanza. Para nuestra fortuna, el personaje que veremos en la nueva película de James Gunn se parece más al segundo, y lo mejor de todo es que no tendremos que esperar mucho tiempo para conocerlo: Superman se estrena el próximo 11 de julio en cines de todo el mundo y estamos seguros de que será el aire fresco que el género de superhéroes viene necesitando desde hace varios años.
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